Organización Neurológica
El cerebro se desarrolla de manera asimétrica y tal asimetría hemisférica no se reduce sólo a la corteza, sino también a las estructuras que se encuentran por debajo de ella.
También la actividad cognitiva se encuentra diferenciada: el hemisferio menor utiliza procesos estrechamente ligados a la espacialidad y por tanto los primeros aprendizajes deben producirse, forzosamente, a través de la acción. Los siguientes aprendizajes pasan, sin embargo, a través de la verbalización y por tanto presuponen el uso del hemisferio dominante.
Conforme avanzan los niveles de desarrollo neurológico ambos hemisferios empiezan a cooperar para la pronta y eficiente resolución de una misma tarea. Sin esta coordinación, se dan "bloqueos" como consecuencia de la no cooperación (leer sin comprender, saber qué decir pero no cómo escribirlo, escuchar sin ser capaz de mantener la atención, retardo en la comprensión del mensaje en un idioma menos conocido, etc).
Así pues, podemos valorar la Organización neurologica de un individuo según los patrones motores corporales que es capaz de activar e inhibir cuando se le pide que realice determinadas acciones.
Según el miembro inhibido y la forma de resolver el conflicto corporo-espacial, podemos comprender qué areas cerebrales tienen un mayor o menor nivel de energía o desarrollo neurólogico, configurando así sus redes neuronales y condicionando por tanto su especialización hemisférica con el movimiento desde el nacimiento.
Por ejemplo: un bebé que siempre se recuesta del lado derecho, porque queremos que mire hacia la ventana, que siempre succiona del mismo pecho porque se alimenta mejor y más rapido, el niño que presenta otitis siempre en el mismo oído, percibirá estimulación en mayor cantidad y calidad de un lado que de otro del cuerpo, lo cual condicionará su desarrollo hacia ese lado, fomentando por igual las habilidades intrínsecas a ese hemisferio (izquierdo=lingüístico-lógico-matemático; derecho=visual, emocional y creativo).
Para que un hemisferio sea el director de una función debe estar informado de lo que ocurre en el hemisferio contrario, y ambos COLABORAR en el éxito de consecución del objetivo final. Ambos hemisferios deben saber y conocer qué realiza el otro en cada momento, y no competir entre ellos, sino colaborar en la resolución del conflicto.
Un estudio adecuado de la organización neurólogica y realizado a tiempo, dará al individuo la oportunidad de desarrollar y potenciar sus circuitos neuronales de manera óptima para el adecuado funcionamiento cognitivo.